Sección áurea; la proporción armónica
La llamada sección áurea es un tipo de proporción usada por los griegos y después por
los renacentistas que se encuentra en múltiples ocasiones en las formas naturales. Se
considera una proporción armónica y ha sido usada tanto en las artes gráficas como en
la arquitectura y la escultura.
Retículas
Puede usarse simplemente la intuición pero también existen recursos metodológicos. El
diseñador gráfico suele usar retículas que ayudan a crear una composición coherente.
Las retículas son estructuras que se usan en el proceso de trabajo pero invisibles en el
resultado final. En éstas se ajustan los elementos gráficos. Las retículas pueden estar
basadas en la repetición de módulos gráficos o estar formadas por líneas que diagraman
el espacio sin formar elementos iguales.
Otra opción es optar por divisiones del plano de la composición derivadas de las
proporciones y estructura del marco. Se trazan divisiones del marco que van creando
una malla o diagramación del espacio de la composición. Estas líneas sirven como
estructura para situar los elementos gráficos.
Esta técnica es ampliamente utilizada por los pintores renacentistas y también en las
artes del libro. Posteriormente será recuperada por los grafistas modernos. A
continuación se muestran algunas divisiones posibles.
Diagramación basada en columnas de texto
El diseño editorial orientado a prensa diaria y a la maquetación de revistas periódicas
requiere de un sistema de diagramación de página ágil, que acepte cambios en la
cantidad de texto y en el tamaño de fotografías y titulares. A la vez el ajuste de todos
estos elementos tiene que hacerse de forma rápida y eficaz.
Para responder a esta situación la mayoría de periódicos utilizan un sistema de
diagramación basada en columnas verticales de texto. La página se divide en seis
columnas, cinco columnas, cuatro columnas o tres columnas. El texto se dispone en ellas
y las imágenes y titulares también encajan en dicha estructura.
Efectos compositivos
El contraste tiene gran importancia en la composición. Una composición ambigua, por
ejemplo en cuanto a equilibrio, produce una sensación visual confusa. Nuestra
percepción intenta corregirla, a través de la nivelación y el aguzamiento de las leyes de
la Gestalt.
En la comunicación visual, a menos que nos interese provocar este efecto en el
observador, tendremos que contrastar la composición desplazándonos hacia uno de los
dos polos (equilibrado o inestable, por ejemplo).
Donis Dondis ha definido diecinueve tipos de contraste compositivo basados en pares
de conceptos que se configuran como polos contrapuestos. Cada polo es un extremo en
cuanto a efecto compositivo. Entre un polo y otro estarían las composiciones cuyo
efecto es intermedio o ambiguo.
Lo realmente interesante es controlar la combinación de distintos tipos de contraste
compositivo (por ejemplo, una imagen equilibrada y con sutileza, o bien, sutil y
desequilibrada o equilibrada, sutil y predecible.
Los verdaderos protagonistas de la composición (condicionados por el marco,
organizados, si cabe, mediante retículas) son los elementos visuales. Su disposición es la
que nos permite generar los contrastes tratados en el apartado anterior.