Los vendajes son una parte fundamental en el servicio de traumatología y ortopedia.
El auxiliar los tendrá que poner de forma adecuada.
Los auxiliares no sólo van a poner vendajes, que deberán conocer con detalle (sus tipos, indicaciones y modificaciones) sino que deberán saber cómo ponerlos: no deberán estar ni muy flojos ni demasiado apretados.
- Se deberán colocar de distal a proximal y es conveniente, si se trata de una extremidad, que asomen ligeramente dos dedos para controlar la inflamación.
- Deberán ser lo más cómodos posible, primando más el volumen que la rigidez. Hay que conocer los materiales, algodón o celulosa, y los diferentes tipos de vendas, simples, elásticas, antiadherentes, cohesivas, etc., que se colocarán con cuidado extremo. Lo mismo para las férulas. Hay una serie de vendajes con nombre propio como el de Robert-Jones, el de Valpeau o el de Ehmer.
En situaciones especiales, cuando un caso interesante lo requiera, puede que haya que hacer fotos o una toma de vídeo. La cámara tendrá que estar localizada y con carga suficiente, y el auxiliar debe conocer a la perfección su funcionamiento. ¡Cuántas veces un fallo en estos pequeños detalles hace que no podamos conseguir unas imágenes impactantes o al menos significativas que queramos guardar!
En sus manos están la planificación, la ejecución, el resultado inmediato y la vuelta a casa en las mejores condiciones, tanto si se trata de una simple consulta, una revisión, un diagnóstico complejo o una intervención quirúrgica.
Definición: Se define el vendaje como la ligadura que se hace con vendas o con otras piezas de lienzo dispuestas de modo que se acomoden a la forma de la región del cuerpo donde se aplican y sujeten el apósito.
Su uso más frecuente, en la actualidad, es cubrir las lesiones cutáneas e inmovilizar las lesiones osteoarticulares.
Aplicaciones:
Las indicaciones de los vendajes son variadas, siendo sus principales finalidades las siguientes:
- Limitar el movimiento de la parte afectada.
- Fijar apósitos o medicamentos tópicos.
- Fijar férulas, impidiendo su desplazamiento.
- Facilitar sostén a alguna parte del cuerpo.
- Comprimir una parte del cuerpo.
- Fijar en su sitio los aparatos de tracción.
- Favorecer el retorno de la circulación venosa de las extremidades.
- Moldear zonas del cuerpo, especialmente muñones de amputación.
Tipos de vendajes:
- Vendaje blando o contentivo: Utilizado para sostener las piezas de una cura o apósito.
- Vendaje compresivo: Utilizado para ejercer una compresión progresiva a nivel de una extremidad, de la parte distal a la proximal, con el fin de favorecer el retorno venoso.
- Vendaje rígido: Con él se logra una inmovilización completa de la parte afectada.
- Vendaje suspensorio: Sostenedor del escroto o de la mama.
- Vendaje protectivo: Tiene como objetivo cubrir una parte sana o enferma para protegerla de una acción nociva.
Tipos de venda:
Las tiras de lienzo utilizadas para realizar los vendajes se denominan «vendas». Estas varían de tamaño y de calidad en el material de fabricación.
Aunque se pueden improvisar vendas a partir de sábanas u otros retales de distintos tejidos, lo más práctico y cómodo es utilizar vendas fabricadas específicamente para usos sanitarios.
Los tamaños más usados son anchos de 5 cm, 7 cm, 10cm y 15 cm.
Hay distintos tipos de vendas:
- Venda de gasa orillada: Es la de uso más común. Fabricada en algodón. Su calidad y características vienen determinadas por la cantidad de hilos por centímetro cuadrado. Son delgadas, ligeras, blandas, y porosas. Indicadas principalmente para fijar apósitos.
- Gasa de Kling: Es un tipo especial, tejida de tal modo que tiende a retraerse. Se amolda y fija fácilmente.
- Venda de muselina: Fabricada en algodón, pero de consistencia y grosor mayor que las anteriores. Es poco elástica pero resistente siendo utilizada para inmovilizar y sujetar férulas. Permite su uso repetido, previo lavado.
- Venda elástica: Se distingue por su elasticidad. Se fabrica entretejiendo algodón y fibras sintéticas elásticas. Útil si se precisa aplicar presión. Permite uso repetido, previo lavado. Son las indicadas cuando el vendaje se aplica en las extremidades para facilitar el retorno venoso.
- Venda elástica adhesiva: Posee una cara con pegamento, lo que facilita su fijación. No debe aplicarse directamente a la piel, por problemas alérgicos o de piel delicada. Colocar debajo otro vendaje de gasa o bien de celulosa.
- Vendas impregnadas en materiales:Materiales que después de su humidificación se solidifican y permiten un vendaje rígido, como el enyesado. En otras épocas según la impregnación se denominaban: almidonado, dextrinado, gelatinado, silicatado.
FIG. Venda de Kling
Material necesario
Vendas: Tira de lienzo o gasa con que se sujeta un apósito
Algodón Plisado: Algodón Absorbente para uso Hospitalario (no esterilizado) y Doméstico 100% natural, blanco, higiénico, procesado con las mejores especificaciones de absorbencia y suavidad.
Férulas: en medicina es un dispositivo o estructura de metal, yeso, fibra de vidrio, que se aplica con fines generalmente terapéuticos. Las más usadas son para tratamiento de fracturas o como complemento de cirugías ortopédicas y en odontología.
Vendas auto adheribles: No requiere de pegamento, ni broches para sujetarla, es una venda que se adhiere a sí misma con una comprensión controlada que da soporte sin que se resbale. Su adherencia provee una compresión que hace que no corte la circulación de la sangre. Ideal para vendajes para soporte, vendajes para compresión para detener hemorragias en las heridas, sostiene el catéter de intravenosa para tener mejor fijación
Cinta adhesiva: La cinta adhesiva se utiliza para unir objetos de manera temporal, o a veces también permanente. La cinta adhesiva contiene una emulsión adhesiva por una cara, aunque existen variedades adhesivas por ambas caras.
Talco: En forma de polvo se utiliza como relleno en la fabricación de papel cartulina, para lacas y pinturas, en la industria cerámica, como aditivo de gomas y plásticos, así como para prevenir irritaciones de la piel y para hidratar ésta.
Sedantes: Un sedante es una sustancia química que deprime el sistema nervioso central (SNC), resultando en efectos potenciadores o contradictorios entre: calma, relajación, reducción de la ansiedad, adormecimiento, reducción de la respiración, habla trabada, euforia, disminución del juicio crítico, y retardo de ciertos reflejos. Un sedante suele denominarse como tranquilizante, antidepresivo, ansiolítico, soporífico, pastillas para dormir, relajante, o sedante-hipnótico.
El procedimiento general para realizar un vendaje es:
- Lavarse las manos.
- En caso de herida, hay que protegerla asépticamente antes del vendaje.
- La piel sobre la que se aplique el vendaje debe de estar limpia y seca.
- Colocar la parte del cuerpo a vendar en una correcta alineación.
- Cuando el vendaje se realiza en prominencias óseas, hay que aplicar un almohallamiento debajo del vendaje.
- Hay que empezar el vendaje desde la parte distal a la proximal.
- Asegurarse de que la presión que se haga al hacer el vendaje sea uniforme.
- Preguntar al paciente si el vendaje realizado le molesta.
Heridas producidas por un mal vendaje
El mal uso de vendajes compresivos da lugar a lesiones isquémicas de miembros distales. Se pueden producir desde tumefacciones intensas que ceden al retirar el vendaje, hasta perdidas de vitalidad progresivas muy extensas con necrosis distal a carpos y tarsos. El reconocimiento temprano de estas complicaciones de los vendajes (examinando diariamente signos de dolor, supuración abundante, malos olores…) es la única manera de prevenir estas lesiones. Se prefiere no intervenir los primeros días, sino optar por el cierre secundario o por segunda intención, ya que a medida que transcurre el tiempo la demarcación entre tejido viable y necrótico puede variar.
La realización de vendajes y su cuidado adecuado son aspectos fundamentales en el tratamiento de heridas y lesiones:
Realización de Vendajes:
- Preparación: Lávate las manos con agua y jabón antes de manipular el vendaje para evitar la contaminación de la herida. Reúne todos los materiales necesarios, incluyendo vendas, gasas estériles, cinta adhesiva médica y tijeras limpias.
- Limpieza de la Herida: Si la herida está abierta, límpiala suavemente con agua y jabón o con una solución antiséptica como agua oxigenada o clorhexidina. Seca cuidadosamente la piel alrededor de la herida.
- Aplicación de la Gasa Estéril: Coloca una gasa estéril sobre la herida para absorber el exudado y protegerla de contaminantes externos. Asegúrate de cubrir toda la superficie de la herida de manera uniforme.
- Aplicación de la Venda: Envuelve la venda alrededor de la zona afectada de manera firme pero no demasiado ajustada. Asegúrate de cubrir completamente la gasa estéril y de que el vendaje se mantenga en su lugar de manera segura.
- Fijación con Cinta Adhesiva: Si es necesario, asegura el vendaje con cinta adhesiva médica. Asegúrate de no aplicar demasiada presión para evitar la restricción del flujo sanguíneo.
- Finalización: Inspecciona el vendaje para asegurarte de que esté bien colocado y seguro. Ajusta si es necesario y corta cualquier exceso de venda o cinta adhesiva.
Cuidado de los Vendajes:
- Inspección Regular: Verifica el vendaje regularmente para asegurarte de que esté limpio, seco y en su lugar. Siempre que sea posible, mantén el vendaje limpio y seco para prevenir infecciones.
- Cambios de Vendaje: Cambia el vendaje según las indicaciones del médico o si se moja, se ensucia o se afloja. Lava y seca la zona afectada antes de aplicar un nuevo vendaje.
- Evita Manipular el Vendaje: Evita tocar o manipular el vendaje innecesariamente para reducir el riesgo de contaminación o desplazamiento.
- Evita la Humedad: Evita la exposición del vendaje al agua o la humedad excesiva, especialmente si no es impermeable. Utiliza protectores de vendajes o envolturas impermeables si es necesario.
- Atención a Signos de Infección: Presta atención a signos de infección, como enrojecimiento, hinchazón, dolor o secreción purulenta alrededor del vendaje. Si observas alguno de estos síntomas, consulta a un médico de inmediato.