Posturas forzadas
La adopción de posturas forzadas con aplicación de fuerzas como factor de riesgo relacionado con lesiones en espalda, hombro, brazos y manos, reviste especial importancia.
En muchos de los puestos de la industria cárnica se realizan tareas de corte con adopción de posturas forzadas en espalda y extremidades superiores (agarre en pinza de cuchillo, abducción/aducción de codo, flexión/extensión brazo, mano).
Existiendo además aplicación de fuerza en el uso de herramientas manuales (cuchillos, sierras, etc).
Riesgos
Trastornos musculoesqueléticos, especialmente dorsolumbares, por el manejo de cargas de peso excesivo, voluminosas o de difícil agarre, así como en la manipulación manual de bandejas y piezas de carne debido a su peso y a la carencia de un buen agarre, respectivamente.
Sobreesfuerzos por posturas inadecuadas o mantenidas en el tiempo, o bien debidas a la realización de movimientos repetitivos, por ejemplo, al manipular piezas de carne, filetearlas o deshuesarlas.
Son posturas adoptadas durante la realización del trabajo que suponen que una o varias regiones anatómicas abandonan una posición de confort y pasan a una posición forzada, pudiendo generar lesiones por sobrecarga, las siguientes:
✓ Permanecer muchas horas de pie (bipedestación prolongada), que se puede traducir en lumbalgias o varices.
✓ Trabajar con los brazos por encima de los hombros para acceder a los jamones colgados, por ejemplo.
✓ Adoptar posturas inadecuadas con las muñecas y los hombros durante las operaciones de despiece y deshuesado.