Colores y modos
Los programas de gráficos que trabajan en mapa de bits (como GIMP o Photoshop) usan
canales de 8 bits, que permiten representar hasta 256 valores, para codificar el color. En
función del tipo de codificación serán necesarios más o menos canales.
Los diferentes sistemas de codificación del color que pueden aplicarse al documento en
el que estamos trabajando son conocidos como modos de color. Los modos de color son
independientes del sistema de codificación elegido en el «Selector de color» para buscar
un tono concreto; después este color quedará representado por la codificación
correspondiente al modo elegido.
La elección de un modo de color u otro depende de la finalidad del gráfico. Hay modos
adecuados para trabajar con un gráfico que deberá acabar impreso y otros adecuados
para gráficos que deberán visualizarse en pantalla. También la cantidad de memoria que
ocupará finalmente el gráfico depende en parte del tipo de codificación de cada modo.
Modo pluma
Corresponde a las imágenes de 1 bit. Son imágenes de sólo dos tonos (por ejemplo,
blanco y negro).
Dependiendo de la densidad de trama podemos conseguir efectos de zonas sombreadas
o iluminadas. Los programas suelen disponer de varios algoritmos opcionales y
parametrizables con los que se obtienen distintos tramados.
Ocupan poco espacio de memoria pero no se pueden utilizar medios tonos. Se usan
tanto para gráficos para la web (que sean muy simples) como para impresión. De hecho
el término pluma es el que se emplea en las artes gráficas para referirse a este tipo de
imágenes.
En el programa Photoshop se conoce con el nombre modo mapa de bits que puede
resultar un poco equívoco. En otros programas (como Gimp) se consigue definiendo una
profundidad de un sólo bit al pasar a modo indexado.
Modo de color indexado
Es un modo de color que trabaja con un solo canal de 8 bits. Por lo tanto, puede
representar un máximo de 256 valores que corresponde a una paleta de otros tantos
colores.
Se usa para gráficos destinados a la web o a producciones multimedia que deberán ser
vistas en pantalla. El hecho de reducir el número de bits en la codificación de la imagen
reduce su peso (memoria que ocupará el archivo). Pueden usarse paletas menores de
256 colores de manera que aún pese menos. Una paleta de dos colores necesitará sólo 1
bit para guardar la información de color y ocupará poca memoria.
La mayoría de programas de gráficos permiten escoger el número de colores de la paleta
(o el número de bits para codificarlo). Esto puede hacerse al escoger el modo de color
en el que se trabajará o bien al final, para generar el gráfico que deberá ir a la web (es el
caso de Fireworks o del módulo «Image Ready» para Photoshop). También permiten
escoger tipos de tramados que ayudan a obtener colores que no están en el gráfico a
través de la mezcla partitiva.
Modo de color escala de grises
Una variante del modo de color indexado sería el modo de escala de grises o medios
tonos. Usa también un canal de 8 bits que da 256 valores de gris.
Es el adecuado para fotografías en «blanco y negro» e imágenes similares. Es un modo
válido tanto para impresión como para pantalla. En comparación con la imagen en color
indexada, la calidad de una imagen en escala de grises es alta pues con 256 grises se
tiene un buen escalado de valores de luminosidad.
Catálogos de color
Existen diferentes catálogos de tintas de impresión que son muy útiles para elegir un
color determinado. Por una incorrecta traducción literal del inglés colour libraries se los
suele llamar librerías de color. Son varios los fabricantes que los realizan. Cada industria
(artes gráficas, textil, automovilística, etc.) tiene sus estándares.
El catálogo más conocido para las artes gráficas es Pantone, pero también existen otros
como Trumatch, Foltone, Toyo o Anpa-Color.
Cuando nos referimos al uso de catálogos de color para gráficos digitales significa que
estos gráficos deberán imprimirse o estamparse usando tintas. Como las tintas están
codificadas usaremos la misma codificación en el ordenador. Si el destino final es, por
ejemplo, una impresión en offset o serigrafía cada tinta elegida corresponderá a un
fotolito y a una plancha o pantalla. Por eso es necesario valorar si vamos a usar tintas
específicas escogidas de un catálogo, como Pantone, o bien usaremos cuatricromía,
codificación CMYK, para imprimir.
Es recomendable escoger tintas de catálogo cuando queramos imprimir menos de 4
colores o cuando queremos añadir un color muy específico difícil de representar por
cuatricromía.
Los programas de dibujo vectorial reconocen cada uno de los colores elegidos y generan
un fotolito para cada uno de ellos. Algunos programas de mapa de bits tienen modos
monotono, duotono, tritono o cuadritono para trabajar sólo con una tinta o con una
combinación de ellas.
Algo que puede confundirnos es que el selector de color de los programas de gráficos
permita elegir colores de determinados catálogos aunque trabajemos en modo RGB o
CMYK. Permiten hacerlo porque algunos diseñadores están muy familiarizados con ellos
y están acostumbrados a elegir el color en base a sus catálogos. Pero no nos engañemos,
el color elegido se codifica según el modo de color que tengamos elegido,
independientemente de cómo se obtenga en el selector de color.