En este capítulo
- Sistema de costes completos Sistema de tasa
- Sistema de secciones
- Secciones o centros de coste
- Unidades de obra
- Coste total por unidad de producto
Ahora que sabes cómo calcular costes con el sistema de costes directos puedes pasar a los sistemas de costes completos, denominados Jull costing en inglés. Se trata de sistemas que proporcionan más información.
El objeto de este capítulo es comprender cómo funcionan los sistemas de costes completos, tanto el sistema de tasa como el sistema de secciones.
El sistema de costes completos por tasa
Con este sistema, todos los costes se imputan a los productos que vende la empresa. Para ello, se dividen los costes entre directos e indirectos. Los costes directos (materias primas, embalajes, mano de obra directa, comisiones de los vendedores, etc.) se asignan al producto sin ninguna dificultad y sin necesidad de elaborar hipótesis subjetivas de reparto.
Los costes indirectos se asignan a los productos a partir de alguna tasa. Por ejemplo, se puede utilizar como tasa de reparto el peso que tienen los costes directos de cada producto sobre el total de costes directos. Otro tipo de tasa sería el peso de un coste directo de un producto (materia prima o mano de obra directa) sobre el total de ese coste directo.
Dado que con este sistema no se analizan a fondo los costes indirectos que se asignan a cada producto, hay que tomar con precaución los datos de costes totales que se obtienen.
Una fábrica metalúrgica produce cigüeñales y pistones de acero inoxidable. En relación con la producción del último mes, se informa de que se han producido 700 cigüeñales y 500 pistones.
Costes directos (€)
Los costes indirectos se reparten en proporción al coste de mano de obra directa (65% para cigüeñales y 35% para pistones).
Si nos basamos en los datos anteriores y aplicamos el sistema de costes completos, podemos hacer los cálculos siguientes:
Por lo tanto, el coste unitario de un cigüeñal es de 320 euros, y el de un pistón, 324 euros.
El sistema de costes totales por secciones
Con este sistema se obtienen el coste total y su desglose entre las diferentes partes de la empresa. De este modo obtenemos el coste total de un producto o servicio a través de la suma de los costes de cada fase de su elaboración, a los que se añaden los costes de las materias primas.
El sistema de costes totales por secciones es recomendable para aquellas empresas que deseen conocer los costes completos de sus productos o servicios y de sus departamentos. Es un sistema muy utilizado en empresas industriales (fabricantes de automóviles, empresas agroalimentarias, etc.) y de servicios (hospitales o escuelas).
En este sistema se utilizan secciones o centros de coste, que son partes de la empresa que tienen un responsable, unas personas y unos medios para llevar a cabo su trabajo. Las secciones suelen coincidir con los departamentos de la empresa. Las secciones también se denominan centros de responsabilidad.
Supón una empresa que produce un producto que pasa por las secciones de corte, ensamblaje y acabado. Su coste total se podría obtener sumando los siguientes costes:
- Coste de las materias primas precisas.
- Otros costes variables (comisiones de vendedores, por ejemplo).
- Coste de sección de corte.
- Coste de sección de ensamblaje.
- Coste de sección de acabado.
El problema de este sistema es que requiere seleccionar criterios fiables para la imputación, también denominada reparto o asignación, de los costes fijos.
Para aplicar el sistema de secciones se siguen los siguientes pasos:
Paso 1
Se divide toda la empresa en secciones o centros de costes (marketing, administración, dirección, relaciones públicas, corte, ensamblaje, almacén, compras, etc.). Si hay costes que no son imputables a ninguna sección, se asignarán a una sección de costes generales. Toda sección se caracteriza por tener un responsable y por tener unos costes asignados. Por regla general, las secciones suelen coincidir con los departamentos de la empresa.
Paso 2
Se asignarán los costes de un período determinado a cada sección. Cada coste se puede asignar según diferentes criterios. Por ej emplo, los costes de personal en función del número de empleados de cada una, los alquileres en función de la superficie que ocupa cada sección, la energía según la potencia instalada, la amortización del inmovilizado según los inmovilizados, etc.
De esta forma sabemos cuál es el coste de cada sección, que es uno de los objetivos de la contabilidad analítica.
En la tabla 6-1 puedes ver un ejemplo de estadística de costes.
Paso 3
A continuación, como se indica en la tabla 6-2, se asignan los costes de las secciones auxiliares de las secciones principales. Las secciones principales son aquellas que intervienen de manera directa en la elaboración del producto o servicio que produce la empresa (ensamblaje, corte, acabado, etc.), y las secciones auxiliares son las que apoyan a las secciones principales (mantenimiento, dirección, relaciones públicas, marketing, administración, etc.). Unas secciones pueden ser principales en una empresa y auxiliares en otra.
El reparto de los costes de las secciones auxiliares a las principales se hace en función de la dedicación de cada sección auxiliar a cada sección principal. Por ejemplo, el reparto de los gastos de mantenimiento se hará en función del tiempo empleado en reparaciones o mantenimiento de cada una de las otras secciones. Por lo general, el reparto se hace con criterios subjetivos como los siguientes:
- Proporcionalmente a los ingresos que genera cada una de las secciones principales.
- Proporcionalmente a los gastos de cada sección principal.
De este modo se obtiene el coste total de cada sección principal de la empresa.
En la tabla 6-2 se plantea un supuesto en el que los costes de las secciones auxiliares, que en total suman 103 600 euros (que resultan de sumar 14 000 + 64 500 + 25 100), se reparten como sigue: 16 000 para la sección de corte, 49 000 para la sección de ensamblaje y 38 600 para la sección de acabado.
Paso 4
En las secciones en que sea posible se tiene que definir la unidad de obra, que es la unidad de medida de la actividad de cada sección. Las unidades de obra suelen ser unidades físicas. Por ejemplo, en la sección de corte pueden ser el número de cortes efectuados, y en la de ensamblaje, las unidades ensambladas. En muchos casos se utiliza el número de horas de mano de obra como unidad de obra.
Paso 5
Una vez que se han definido las unidades de obra de cada sección, se dividen los costes totales de cada sección principal por las unidades de obra producidas en el período considerado.
En el ejemplo, se plantea el supuesto de que la sección de corte ha efectuado 23 850 cortes, la sección de ensamblaje ha ensamblado 25 186 piezas y la sección de acabado ha procesado 1243 unidades de producto. De esta forma obtenemos el coste de cada unidad de obra, como se refleja en la tabla 6-3.
Paso 6
Se calcula cuántas unidades de obra de cada sección hacen falta para obtener una unidad de producto. Este número de unidades de obra necesarias se multiplica por el coste de una unidad de obra en la sección respectiva. Con ello obtenemos los costes de producción del producto por secciones.
Paso 7
Para calcular el coste total de una unidad de producto sumaremos el coste de las materias primas y otros costes variables directamente imputables al coste de las secciones.
Por ejemplo, para producir una unidad de producto se han necesitado materias primas por valor de 250 euros, 15 cortes en la sección de corte, 140 piezas en la sección de ensamblaje y 1 unidad en la sección de acabado. El coste de una unidad de producto será:
Así podemos conocer el coste total del producto y el coste de cada una de las etapas de su elaboración. Con esta información se puede optimizar cada una de las etapas del proceso productivo.
El sistema de costes utilizado influye en los costes de los productos y, por lo tanto, en el valor de las existencias y en el resultado del período. Con un sistema de costes completos el valor de las existencias finales será más elevado y, por lo tanto, el beneficio de la cuenta de resultados será mayor. En cambio, con un sistema de costes directos, las existencias finales tendrán un valor más reducido al incorporar solamente los costes directos. En este caso, el beneficio de la cuenta de resultados será menor, ya que los costes indirectos se imputarán todos al período.
A continuación se presenta el coste por producto del ejemplo anterior con diferentes sistemas de costes.
Como ya sabemos cuál es el coste por unidad de producto con el sistema de secciones y el sistema de costes directos (considerando sólo el coste de los materiales), vamos a añadir información sobre el sistema de tasa.
Se sabe que la empresa tiene unos costes indirectos que representan el 150% del coste de las materias primas. Este porcentaje nos servirá para aplicar el sistema de tasa.
En la tabla 6-4 se puede comprobar que el sistema que proporciona una información más detallada del coste de una unidad de producto, es el sistema de secciones:
Por lo tanto, el sistema de costes directos es el más rápido y sencillo pero proporciona información sólo sobre una parte de los costes, los costes directos.
El sistema de tasa proporciona un coste completo, pero no analiza de manera detallada el coste indirecto asignado al producto.
Por último, el sistema de secciones es el que proporciona una información más detallada sobre los diferentes componentes del coste completo.