Objetivos de esta unidad didáctica
- Distinguir los diferentes equipos específicos de aplicación de fitosanitarios.
- Identificar los elementos principales del equipo.
- Conocer su forma de funcionamiento y la influencia sobre la aplicación del producto fitosanitario.
1. Introducción
La formación de este Curso de Manipulador de Productos Fitosanitarios nivel Básico, capacita para aplicar los productos fitosanitarios sobre el cultivo o el suelo, de dos formas:
- Líquida: el producto se aplica, mezclado con agua, sobre el cultivo o el suelo.
- Sólida: se aplica el producto formulado sobre el cultivo o el suelo, directamente como sólido, en polvo o en gránulos
Existen bastantes equipos de aplicación de fitosanitarios, desde los más pequeños que funcionan de forma manual (como este antiguo de la foto), hasta aperos autopropulsados con grandes capacidades. La elección del mejor equipo de aplicación va a depender, además de la forma de aplicación del fitosanitario, del cultivo a tratar y del tamaño de la explotación.
2. Pulverización
La pulverización se define como el fraccionamiento de un caldo fitosanitario en gotas. Se puede convertir el líquido en gotas de dos formas principalmente:
1. Haciendo pasar el líquido a presión a través de un agujero muy pequeño. Estaríamos hablando de pulverizadores hidráulicos o de chorro proyectado. Una bomba da presión al caldo que pasa a través de la boquilla convirtiéndose en gotas. Las gotas así formadas se mueven por el aire debido a la presión con la que salieron de la boquilla. Tenemos que tener en cuenta que:
o Es especialmente adecuado para cultivos herbáceos de bajo porte o utilizando pistolas de tratamiento.
o Hay que realizar una buena aplicación al interior del cultivo ya que esta zona no recibe un número suficiente de gotas para su protección.
o La trayectoria del líquido en el aire debe ser corta (a larga distancia sólo llegan las gotas grandes y baja la uniformidad).
o Las boquillas deben estar próximas a la vegetación.
o Para tratamientos donde la gota tras salir de la boquilla tiene que ir hacia arriba o en una trayectoria larga horizontal son necesarias grandes presiones, por lo que no suele ser el método más adecuado en estos casos.
2. Rompiendo el líquido utilizando una corrient de aire a gran velocidad. Para ello, el líquido se hace pasar por una corriente de aire, formada por un ventilador o una turbina, que lo convierte en gotas. La corriente de aire es la que transporta el líquido por el aire. Son los llamados atomizadores, pulverizadores de chorro transportado. Este sistema tiene una serie de características:
a. Es especialmente adecuado para cultivos de porte alto (árboles) o con un follaje muy denso.
b. Logran mayor penetración en la vegetación que los pulverizadores hidráulicos.
c. Tienen más problema de deriva, al crear gotas más pequeñas.
d. Requieren más energía para funcionar que los pulverizadores hidráulicos.
Pulverización hidráulica
Como se explicó anteriormente, la formación de las gotas se realiza al hacer pasar a presión el caldo a través de las boquillas. Por lo tanto, el tamaño de la gota va a depender de:
- La presión de trabajo. A mayor presión de trabajo, menor tamaño de la gota. La presión se mide normalmente en los equipos en kilos por centímetro cuadrado (kg/cm2), bares (bar) o de forma menos frecuente en atmósferas (atm) mediante un aparato llamado manómetro.
Los medidores de presión de los neumáticos de las gasolineras son también manómetros. A efectos prácticos se puede considerar que las tres unidades tienen valores similares. Una presión de 5 bar es muy parecida a 5 kg/cm2 o a 5 atm.
Los pulverizadores trabajan normalmente entre los 1 y los 8 bar para cultivos de porte bajo, teniendo que trabajar entre 20 y 40 bar en cultivos altos y frutales. Recuerde que la presión dentro de un neumático de coche suele ser aproximadamente 2 bar.
Los equipos manuales de mochila no suelen tener manómetro. Normalmente trabajan en el entorno de los 1.5 a 3 bar. En el caso de trabajar con mochilas eléctricas, la presión de trabajo puede llegar a los 5 bar. Las que tienen un motor de gasolina trabajan entre 10 y 35 bar. anterior
- La boquilla. La boquilla es uno de los elementos más pequeños del equipo de pulverización y que muchas veces no se tiene en cuenta. Sin embargo, la boquilla es la parte más importante del equipo para que la aplicación sea lo más eficiente posible, logrando un buen control del problema a resolver con unos problemas de deriva mínimos. Cuando elegimos una boquilla estamos definiendo:
- El tamaño de la gota
- El alcance de la gota
- Cómo se distribuye el chorro de gotas.
El principal criterio de elección de la boquilla es el tamaño de gota que se desea aplicar. El tamaño de la gota va a depender del tamaño del orificio de la boquilla y del tipo de boquilla.
Tipo de boquilla
Existen muchísimos tipos de boquillas para diferentes tipos de aplicación, existiendo varios criterios para elegir la mejor. En la tabla siguiente se citan los tipos de boquillas más extendidos y los usos para los que se recomiendan:
De esos tipos de boquilla, los más utilizados en la agricultura de Tenerife son:
- Boquilla de turbulencia de chorro hueco. Dentro de la boquilla se crea una turbulencia que rompe el líquido. Se utilizan normalmente para tratamientos dirigidos al cultivo con pistolas aplicadoras o lanzas y en equipos con asistencia de aire.
Algunos modelos de estas boquillas en equipos de mochila permiten regular el ángulo del cono. Este tipo de boquillas no suelen dar tamaños de gota muy regulares (baja homogeneidad).
- Boquilla de abanico o de chorro plano. Se caracteriza por tener una especie de surco o hendidura. El chorro de gotas tiene una forma de abanico. Se utilizan normalmente para tratamientos dirigidos al suelo y en cultivos bajos.
Normalmente, entre estos dos tipos de boquilla, para un mismo tamaño del orificio y trabajando con presiones similares, el tamaño de gota es más pequeño en las boquillas de turbulencia.
Tamaño del orificio. Existe un código de colores internacional que define el tamaño del orificio de la boquilla:
Para un tipo de boquilla determinada y a una presión determinada, cuanto más pequeño sea el orificio, más pequeña será la gota formada.
Elementos de un pulverizador hidráulico
Todos los pulverizadores hidráulicos tienen una serie de elementos comunes, independientemente del tamaño, desde pulverizadores de mochila hasta aperos arrastrados por tractores:
- Un depósito para contener el caldo fitosanitario. Debe llevar algún sistema de agitación (especialmente importante si se trata de polvos mojables).
- Una bomba que da presión al caldo. La bomba puede estar movida por el propio aplicador (equipos manuales), por un motor (eléctrico o de explosión) o por el tractor al que va suspendido o arrastrado (por toma de fuerza o mediante el sistema hidráulico).
- Un sistema de control de la aplicación. Suele estar formado por reguladores de la presión de la bomba. Normalmente si hay un regulador, debe haber un manómetro para controlar la presión de trabajo.
- Un sistema de filtrado para evitar que lleguen impurezas a las boquillas. Como mínimo hay un filtro en la entrada del depósito para que no entren elementos en el agua y otro antes de las boquillas en el que suelen quedarse posibles elementos que no quedaron bien mezclados al hacer el caldo.
- Un sistema de tuberías y válvulas que permita el paso del caldo del depósito a la bomba, y de ésta a las boquillas.
1: Filtro en la empuñadura de la lanza.
2: Manilla de paso
8: Palanca de accionamiento de la bomba 9: Filtro en la boca del depósito
11: Bomba
12: Lanza
13: Agitador (se mueve cuando se bombea)
17: Depósito
20: Boquilla
Principales elementos de un pulverizador de mochila (solo se enumeran los más importantes)
- Un sistema que porte las boquillas. Puede ser una lanza o pistola de aplicación manual, un portaboquillas de carretilla o una barra portaboquillas.
- Las boquillas, de las que hemos hablado anteriormente.
Tipos de pulverizadores hidráulicos:
- Pulverizadores de mochila. Los pulverizadores de mochila llevan todo el sistema a la espalda del aplicador (depósito, bomba y regulación). La boquilla se porta al final de una lanza de tratamiento. En algunos casos, las lanzas llevan más de una boquilla.
La bomba del pulverizador funciona por la fuerza del propio operador, mediante una pequeña bomba eléctrica y una batería, o con una bomba movida por un pequeño motor de gasolina.
Una ventaja de los pulverizadores eléctricos o de motor es que mantienen la presión de trabajo constante. Por tanto, la dosis de caldo aplicada por superficie sólo depende de la velocidad de avance del trabajador. En los equipos de mochila manuales, la presión no permanece constante.
Asimismo trabajan a presiones mayores que los pulverizadores completamente manuales, lo que les permite manejar de forma más amplia el tamaño de gota.
- Sistemas con manguera. En estos sistemas, el depósito y la bomba están fijos (aunque pueden ser móviles, no se mueven al mismo tiempo que el aplicador). El caldo se transporta por mangueras plásticas para alta presión (normalmente para presiones de más de 20 bar). Estas mangueras terminan normalmente en pistolas de tratamiento (aunque también lo pueden hacer en lanzas).
Las mangueras pueden estar conectadas a un equipo portátil (carretilla), a un pulverizador accionado por tractor o en algunos casos a equipos fijos. En estos equipos, además suele haber una red de tuberías fijas por la finca a la que conectar las mangueras.
En la mayoría de los casos la persona encargada de realizar la aplicación es asistida por un operario para manejar la manguera. Por lo tanto, debe tenerse en cuenta que, en muchos casos, mediante esta técnica son dos o más las personas expuestas a productos fitosanitarios.
En cultivos entutorados en invernadero se ha desarrollado una carretilla portaboquillas a la que se conecta la manguera. Además de realizar más rápidamente el tratamiento al montar varias boquillas orientables, el aplicador camina arrastrando la carretilla por lo que no entra en la nube formada por la pulverización.
- Pulverizadores propulsados. En este caso, el aplicador no mueve ninguna parte del pulverizador. Nos encontraríamos con carretillas autopropulsadas pensadas para cultivos en invernadero y pulverizadores suspendidos o arrastrados por tractores, usados en cultivos al aire libre.
Existen pulverizadores suspendidos para tractores con depósitos a partir de 200 litros. Disponen de una barra portaboquillas para poder tratar muchas líneas de cultivo al mismo tiempo. Se utilizan para cultivos bajos.
Atomización
Los atomizadores se diferencian de los pulverizadores hidráulicos en que el transporte de las gotas desde las boquillas al cultivo o el suelo se realiza mediante una corriente de aire. Esta corriente de aire se produce mediante un ventilador o turbina.
La formación de las gotas se realiza al hacer pasar a presión el caldo a través de las boquillas. Por lo tanto, el tamaño de la gota va a depender de la velocidad del chorro de aire. A mayor velocidad, menor tamaño de gota.
La principal ventaja de este sistema es la buena penetración en el follaje, ya que la corriente de aire mueve las hojas, facilitando que las gotas lleguen a zonas dentro de las plantas. Además se moja más fácilmente el envés de las hojas. Por ello suelen ser las máquinas más recomendadas para árboles, viña y en general cultivos con un follaje muy denso.
En los llamados pulverizadores hidroneumáticos, hay una bomba similar a la de los pulverizadores hidráulicos que lleva el caldo a presión hasta las boquillas. La corriente de aire tiene como función principal el transporte de las gotas formadas aunque también las rompe, disminuyendo el tamaño. Estas máquinas son casi siempre equipos suspendidos o arrastrados por tractores y suelen usarse en cultivos herbáceos y viña y suelen distinguirse por el ventilador con una corona de boquillas.
En otros casos, el caldo llega sin presión hasta una corriente de aire de mayor velocidad que en el caso anterior, que es la que forma las gotas.
Estas máquinas serían los atomizadores propiamente dichos. Son menos frecuentes que los pulverizadores de tipo hidroneumático como aperos grandes suspendidos o arrastrados por tractor. Los aparatos de mochila son propiamente atomizadores
Pulverizador hidroneúmatico. A la izquierda, Las flechas azules señalan por donde entra el aire y las rojas por donde sale, impulsadas por el ventilador. Se observa la corona de boquillas alrededor de la salida de aire. A la derecha, pulverizador hidroneumático con deflectores que permiten dirigir la corriente de aire.
En el caso de los atomizadores de mochila, disponen de un motor pequeño que acciona un ventilador, que dirige el chorro de aire hacia una tobera. El caldo de tratamiento desciende por gravedad desde el depósito por un tubo flexible hasta una especie de boquilla que se encuentra en la tobera. Estos aparatos son muy similares a los sopladores que se usan en jardinería, pero con un depósito.
Casi todas las partes de un pulverizador hidroneumático son similares a las de un pulverizador hidráulico, además de un ventilador y los elementos que lo mueven desde la toma de fuerza del tractor o del sistema hidráulico.
En lo referente a los atomizadores, además del ventilador y los elementos que hacen que gire, siempre hay una tobera por la que pasa el aire impulsado hacia una boquilla por donde sale el líquido para producir las gotas.
1: Tapa del tanque
2: Tanque
7: Manilla de arranque del motor
8: Filtro de aire
9: Depósito de combustible del motor
10: Motor
13: Asa con los mandos del motor
14: Tobera de aire
16: Válvula de entrada del caldo a la tobera.
20: Boquilla
21: Carcasa del ventilador
Principales elementos de un atomizador de mochila
3. Espolvoreo
Los equipos de espolvoreo depositan sobre el cultivo o el suelo el producto fitosanitario formulado directamente. Para que el producto llegue al cultivo se utiliza una corriente de aire.
En general, los equipos de espolvoreo son más sencillos y más baratos que los pulverizadores de la misma capacidad. Sin embargo, prácticamente el único fitosanitario que se aplica en espolvoreo es el azufre.
Del mismo modo que con los pulverizadores, tendríamos una serie de partes comunes:
- Un depósito o tolva para contener el producto fitosanitario.
- Un fuelle, ventilador o turbina que genera la corriente de aire que transportará el polvo. El ventilador o fuelle puede estar movida por el propio aplicador (equipos manuales), por un motor (eléctrico o de explosión) o por el tractor al que va suspendido o arrastrado (por toma de fuerza o mediante el sistema hidráulico).
- Un sistema de control de la aplicación. Suele estar formado por un sistema en la base de la tolva, que permite diferente apertura. Cuanto más abierto está la salida de la tolva, mayor cantidad de polvo aplicado.
- Una cámara de aventamiento, que es el lugar donde el polvo dosificado en el sistema anterior se pone en contacto con la corriente de aire.
- Una tobera que lleve el aire con el polvo hacia el deflector.
- Un deflector, al final de la tobera, que permite dirigir la corriente de aire y polvo. La aplicación más común es de abajo hacia arriba, para que el polvo se deposite en el envés de la hoja y el que suba luego cubra el haz.
Tipos de espolvoreadores
- Espolvoreadores de mano: Son los más pequeños. Permiten tratar con un máximo de 1 a 2 kg de polvo. No son recomendables para superficies mayores de 500 m2. Su calidad de trabajo es bastante deficiente.
En algunos sitios se sigue aplicando el azufre utilizando la tela de un saco. El mismo saco hace de depósito y al agitarlo sobre el cultivo, el azufre cae por la tela. En todo caso, se debería utilizar una tela más fina para lograr una mejor calidad en la aplicación (por ejemplo, una media). Con este sistema es bastante difícil aplicar dosis exactas.
- Espolvoreadores de mochila. Los espolvoreadores de mochila llevan todo el sistema a la espalda del aplicador. Como en el caso de los pulverizadores, el ventilador o fuelle puede funcionar de forma manual o con un motor eléctrico.
Espolvoreador manual de manivela (se coloca por delante) a la izquierda y de palanca (se coloca por detrás) a la derecha.
- Espolvoreadores propulsados. En este caso, el aplicador no mueve ninguna parte del espolvoreador. Normalmente suelen ser aperos suspendidos o arrastrados por tractores, con varios deflectores que permiten tratar a los dos lados del tractor.
Los equipos de aplicación se utilizan en diversas industrias para aplicar productos de manera controlada, ya sea en la agricultura, la jardinería, la industria química o en la desinfección, entre otros:
1. Pulverizadores:
Descripción:
- Los pulverizadores son dispositivos que convierten un líquido en pequeñas gotas para dispersarlo en una superficie. Pueden ser manuales, mochilas pulverizadoras, o equipos montados en vehículos.
Funcionamiento:
- Un líquido, como un pesticida o herbicida, se almacena en un tanque. La bomba del pulverizador impulsa el líquido a través de una boquilla, rompiéndolo en gotas finas que se dispersan sobre la superficie objetivo.
2. Atomizadores:
Descripción:
- Similar a los pulverizadores, los atomizadores también transforman líquidos en pequeñas partículas. Se utilizan comúnmente en la agricultura para la aplicación de pesticidas.
Funcionamiento:
- Un ventilador o turbina genera un flujo de aire que dispersa el líquido en forma de finas gotas o niebla. Esto permite una cobertura más uniforme sobre los cultivos.
3. Dusters o Esparcidores de Polvo:
Descripción:
- Los dusters o esparcidores de polvo son equipos diseñados para la aplicación de productos en forma de polvo, como insecticidas en polvo o fertilizantes.
Funcionamiento:
- El polvo se almacena en un depósito y se libera a través de un conducto, utilizando la acción del viento o un mecanismo interno para dispersar el polvo sobre la superficie deseada.
4. Equipos de Nebulización:
Descripción:
- Los equipos de nebulización generan una fina niebla de líquido. Se utilizan en la desinfección de espacios, sistemas de climatización y humidificación.
Funcionamiento:
- Utilizan bombas o presión de aire para convertir líquidos en gotas extremadamente pequeñas. Pueden tener boquillas especiales para lograr diferentes tamaños de partículas.
5. Equipos de Fumigación:
Descripción:
- Los equipos de fumigación se emplean para la dispersión de productos químicos en forma de gas o vapor para la desinfección de espacios.
Funcionamiento:
- Los productos químicos líquidos se convierten en gas o vapor mediante calentadores o sistemas de presión. Este gas se dispersa en el área deseada.
6. Equipos de Aspersión:
Descripción:
- Los equipos de aspersión se utilizan para aplicar líquidos en forma de chorro, ideal para la irrigación o aplicación de fertilizantes en la agricultura.
Funcionamiento:
- Utilizan una bomba para generar presión y dirigir un chorro de líquido a través de una boquilla. Pueden ser accionados manualmente o montados en vehículos.