PRODUCTOS FITOSANITARIOS ILEGALES: IDENTIFICACIÓN Y RIESGOS ASOCIADOS A SU USO
En los últimos años se ha incrementado el mercado de productos fitosanitarios ilegales, aprovechando la necesidad del agricultor de contar con productos que permitan un eficiente control fitosanitario en sus cultivos.
El uso de productos fitosanitarios ilegales supone, en algunos Estados Miembros de la Unión Europea, más del 25% de los plaguicidas en circulación, según fuentes de la Europol. Estos productos ilegales son una amenaza para la salud pública, para el medio ambiente natural y para el futuro del sector agrícola.
12.1 IDENTIFICACIÓN DE PRODUCTOS FITOSANITARIOS ILEGALES
Bajo el término de producto fitosanitario ilegal, se engloban todos aquellos que no están homologados, es decir, que no han pasado los trámites legales para su comercialización y, por tanto, no pueden adquirirse en los puntos oficiales de distribución. En el grupo de los ilegales, también se encuentran las falsificaciones de fitosanitarios legales y los productos que aunque estuvieron autorizados, perdieron posteriormente dicha autorización.
Figura 1. Fitosanitarios decomisados listos para ser reenvasados
Los productos fitosanitarios ilegales pueden llegar a Europa como producto formulado a granel, listo para ser envasado y etiquetado o como producto formulado, embalado y etiquetado, preparado para la venta.
En ocasiones, estos productos se comercializan como sofisticadas copias de productos exclusivos cuyo aspecto es exactamente igual al original, lo que incurre en una infracción sobre la propiedad intelectual y la propia marca. Para evitar esto, algunas casas comerciales, emplean hologramas de seguridad, más difíciles de falsificar.
Otros fitosanitarios ilegales detectados por las autoridades europeas son copias de productos genéricos no autorizados en el país, con etiquetas en las que solo aparece el nombre de la materia activa y la concentración; o bien productos con la materia activa original más diluida y envasados en calidades inferiores.
A veces, el usuario adquiere un producto ilegal sin saberlo, por lo que es importante prestar especial atención a las etiquetas y a los envases, a la hora de adquirir estos productos. En general se recomienda lo siguiente:
- La etiqueta debe contener el número de registro. Este número indica que las autoridades sanitarias han comprobado la información recogida en la etiqueta y que el producto puede ser usado con los requisitos que esta recoja.
- Busque la composición del producto. Todos los productos registrados deben recoger los ingredientes activos que contienen.
- Compruebe para qué cultivos está autorizado el producto. No todos los productos que combaten una plaga están registrados para usarse en todos los cultivos.
- Compre productos que tengan la etiqueta legible, bien adherida al envase y a la caja, y con el nombre del importador y titular mostrado con claridad.
- Compre fitosanitarios de proveedores que estén inscritos en el Registro Oficial de Productores y Operadores (ROPO).
- Pida el albarán y/o factura de compra del producto.
- Pregunte al proveedor por la información sobre los equipos de seguridad y protección recomendados por el fabricante.
- Sospeche de las ofertas y descuentos excesivos.
- En caso de duda puede contactar directamente con las Delegaciones Territoriales de la Consejería de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural o en la página web del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (magrama.gob), que contiene criterios de búsqueda de productos fitosanitarios por número de registro, nombre comercial, sustancia activa, plagas, aplicación y ámbitos de utilización.
- Comunique cualquier sospecha sobre productos falsificados a la autoridad competente de la zona.
El Real Decreto 1311/2012, de 14 de septiembre, establece el marco de actuación para conseguir un uso sostenible de los productos fitosanitarios. Entre otras, establece las disposiciones necesarias para llevar registros de utilización de productos fitosanitarios y regula el Registro Oficial de Productores y
Operadores de medios de defensa fitosanitaria (ROPO), en el que se incluyen las actividades de suministro de medios de defensa, realización de tratamientos fitosanitarios, asesoramiento y por último, manipulación- utilización de productos fitosanitarios de uso profesional.
Así, para contribuir a la lucha contra los productos ilegales, en lo que al suministro de productos fitosanitarios se refiere, el Real Decreto 1311/2012 establece que para ejercer las actividades de fabricación o producción material, la comercialización, la distribución o venta al público y la logística, incluyendo el transporte y almacenamiento, de productos fitosanitarios, es necesario estar inscrito en el ROPO.
Tanto AEPLA (Asociación Empresarial para la Protección de las Plantas) que es una asociación nacional y que representa mayoritariamente al sector de fabricantes de productos fitosanitarios, como ECPA (European Crop Protection Association) que es una asociación europea y representa a la industria de productos fitosanitarios, trabajan en la lucha contra el mercado ilegal de estos productos realizando campañas informativas para concienciar al sector de las peligrosas consecuencias que el uso de los mismos pueden llegar a provocar.
Además, se han introducido líneas de teléfono de denuncias manteniendo el anonimato, se está trabajando con las aduanas para la rápida localización de los productos ilegales, y se han desarrollado pautas a seguir por las cadenas de suministro de productos fitosanitarios.
Los protocolos de trazabilidad obligatorios en el sistema agroalimentario, facilitan la identificación de los productos ilegales y de las personas que cometen fraude al usarlos. Esto permite localizar las fincas de las que proceden los productos e inmovilizar las partidas contaminadas.
12.2 RIESGOS ASOCIADOS AL USO DE PLAGUICIDAS ILEGALES
La peligrosidad de los productos fitosanitarios ilegales es difícil de cuantificar, ya que no están registrados, lo que implica que no están sujetos a las pruebas y controles de fabricación previstos en la legislación que regula este tipo de productos.
Muchos plaguicidas ilegales son muy tóxicos, lo que implica un importante riesgo para la salud de las personas que los manipulan. Otros contienen ingredientes desconocidos, cuya composición y estabilidad pueden modificarse con el tiempo, y por tanto varían también sus efectos perjudiciales no solo sobre las plagas sino sobre el propio cultivo, llegando incluso a producir daños en el siguiente cultivo.
En otros casos, los productos ilegales están disponibles al público en versiones legales, registrados por las autoridades correspondientes. Sin embargo, la versión ilegal contiene menor cantidad de materia activa, o ingredientes activos contaminados con otro material o simplemente no tienen materia activa. Los agricultores que los adquieren, en ocasiones sin saberlo, corren el riesgo de no controlar las malas hierbas, los insectos o las enfermedades.
Los productos fitosanitarios falsos o ilegales dejan residuos desconocidos en los alimentos sobre los que se aplican, con el consiguiente riesgo que esto conlleva para la salud del consumidor. Otro riesgo asociado al uso de plaguicidas ilegales es la obstrucción de las boquillas de los equipos pulverizadores.
RESUMEN
El uso de productos fitosanitarios ilegales es un problema creciente en la Unión Europea. Estos productos no han pasado ningún tipo de control ni trámite legal para su comercialización, por lo que los riesgos que su uso conlleva son numerosos.
La realización de tratamientos fitosanitarios con productos ilegales puede poner en peligro la salud de las personas que los utilizan y del resto de la población ya que pueden dejar en los alimentos residuos tóxicos. Además, pueden ocasionar graves problemas de fitotoxicidad en los cultivos sobre los que se utilizan e incluso en posteriores cosechas.
Para evitar estos riesgos, los usuarios de estos productos deben seguir una serie de recomendaciones a la hora de adquirirlos, como huir de ofertas excesivas, comprar en locales autorizados o comprobar que la etiqueta es perfectamente legible y está bien adherida al envase.
AUTOEVALUACIÓN
1.- Los productos fitosanitarios ilegales…
a) No entrañan ningún riesgo para la salud ni para el medio ambiente, solo causan pérdidas económicas a las grandes multinacionales
b) Son aquellos que se comercializan en envases de más de 50 kg
c) Son productos que no han pasado los trámites legales para su comercialización y no se pueden comprar en los puntos oficiales de distribución
d) Nunca se han detectado en la Unión Europea
2.- Para evitar la compra de un fitosanitario ilegal, se debe comprobar que la etiqueta del producto es perfectamente legible y está bien adherida al envase.
Verdadero / Falso
3.- ¿Qué es el ROPO?
a) Registro Oficial de Productos Homologados
b) Registro Oficial de los Principales Operadores de Medios de Defensa Fitosanitaria
c) Registro Oficial de Productores y Operadores de Medios de Defensa Fitosanitaria
d) Registro Oficial de Productores de Oro
4.- ¿Cuál de las siguientes afirmaciones, relacionadas con los productos fitosanitarios ilegales es incorrecta?
a) Los productos fitosanitarios ilegales pueden contener ingredientes tóxicos, lo que los hace especialmente peligrosos para la salud
b) Los productos fitosanitarios ilegales pueden obstruir las boquillas de los pulverizadores
c) Gracias a los protocolos de trazabilidad puede saberse de qué finca procede un cultivo contaminado con un producto ilegal
d) A la hora de adquirir un producto fitosanitario es imposible detectar su legalidad
La presencia y uso de productos fitosanitarios ilegales representan graves riesgos para la salud humana, la biodiversidad, y el medio ambiente en general. Identificar y abordar estos productos es esencial para garantizar prácticas agrícolas seguras y sostenibles:
Identificación de Productos Fitosanitarios Ilegales:
- Etiquetas y envases sospechosos:
- Verificar las etiquetas y envases de los productos para detectar irregularidades, como errores tipográficos, etiquetas desgastadas o información incompleta.
- Canal de distribución no autorizado:
- Comprar productos solo a través de canales de distribución autorizados y reconocidos para reducir el riesgo de obtener productos falsificados o ilegales.
- Precio extremadamente bajo:
- Precios significativamente más bajos que los productos similares en el mercado pueden ser indicativos de falsificaciones o productos ilegales.
- Falta de registro o autorización:
- Verificar la presencia de los productos en la lista de productos fitosanitarios registrados y autorizados por las autoridades competentes.
- Origen desconocido:
- Desconfiar de productos cuyo origen no puede ser verificado o que carecen de información sobre el fabricante.
Riesgos Asociados al Uso de Productos Fitosanitarios Ilegales:
- Toxicidad desconocida:
- Los productos ilegales pueden contener ingredientes activos no declarados o sustancias tóxicas que pueden representar riesgos para la salud humana y animal.
- Residuos no autorizados:
- El uso de productos no autorizados puede dar lugar a la presencia de residuos químicos no permitidos en los alimentos, violando las normativas de seguridad alimentaria.
- Resistencia y falla en el control de plagas:
- El uso de productos no auténticos puede conducir a la resistencia de las plagas y enfermedades, ya que estos productos pueden carecer de la eficacia necesaria.
- Contaminación ambiental:
- La aplicación de productos fitosanitarios ilegales puede resultar en la contaminación del suelo, agua y aire, afectando negativamente a la biodiversidad y los ecosistemas.
- Daños a los cultivos:
- Productos no autorizados pueden tener formulaciones inadecuadas que causen daños a los cultivos, afectando la calidad y cantidad de la producción.
- Impacto en la reputación del agricultor:
- El uso de productos ilegales puede dañar la reputación del agricultor y afectar su capacidad para acceder a mercados que exigen cumplimiento con normativas y estándares.