21. Aprende de los datos Exif
Cuando miras tus fotos, es una práctica muy inteligente revisar la configuración de la cámara al momento de la toma. Esta información te la proporcionan los datos Exif. Los datos EXIF contienen información relativa a la propia imagen y a cómo ha sido tomada. Los datos principales, que deberías dominar, incluyen la apertura, velocidad del obturador, ISO, flash y distancia focal. Para hacer esto, consulta los archivos Exif de cada fotografía. Si no sabes hacerlo consulta tu manual. Esta práctica puede ayudarte a tomar nota de las cosas que has hecho bien o mal, y así mejorar tu desempeño. Por otro lado, estos datos te permiten conocer exactamente la configuración que otro fotógrafo utilizó al momento de tomar una fotografía. Hoy en día, existen muchos sitios web que publican fotos con sus respectivos datos Exif, uno de ellos es el famoso Flickr.com
22. Usa el flash al aire libre
Para muchos, esta idea puede sonar un poco extraña, pero la realidad es que usar tu flash cuando estás sacando fotos en el exterior, es una práctica común entre los fotógrafos y realmente una buena idea. Los profesionales le llaman “flash de relleno” y sirve para iluminar a tu sujeto especialmente si la luz solar es muy dura y se producen sombras con mucho contraste, tal sería el caso de un mediodía soleado (el sol está arriba) donde se generan sombras muy duras sobre el rostro de una persona.
23. Cómo fotografiar salidas o puestas de sol
Lo primero que debes saber es la hora exacta de la puesta/salida del sol informándote en tu periódico local. Luego asegúrate de llegar con tiempo al lugar para preparar tu equipo. La utilización de un trípode es muy recomendable, para no tener que utilizar valores altos de ISO. En este tipo de fotografías suele ser una buena práctica bajar la exposición para generar mayor contraste. Con todo esto, prueba disparar con algún modo que te permita ajustar la velocidad de obturación o la apertura del diafragma en lugar de usar el modo automático.
24. Tus imágenes necesitan una copia de seguridad
Una copia de seguridad de tus imágenes es fundamental e impostergable si no quieres ser víctima de los fallos de la tecnología.
No te imaginas lo fácil que puede fallar una tarjeta de memoria o tu ordenador. La buena noticia es que hacer una copia de seguridad es muy fácil. Solo debes comprar un disco duro externo y copiar todas tus imágenes allí. Haz un copia de tus imágenes cada dos semanas o un mes (esto dependerá de la cantidad de fotos que tomas), y guárdalas en tu disco duro externo.
25. No olvides el fondo
Al sacar fotos a una persona u objeto, nunca debes olvidar lo que está por detrás. El fondo de la imagen debe ser algo que no distraiga al observador de la fotografía. En otras palabras, el fondo no debe ser más interesante que el sujeto u objeto fotografiado. Además, te en cuenta que el fondo se convierte en parte fundamental del cuadro y complementa la historia que transmite tu fotografía, dado que ofrece mayores pistas sobre el lugar donde se encuentra el sujeto y detalles sobre lo que está haciendo.
26. Peligro: flash incorporado
El flash incorporado de tu cámara supone un peligro: dejar al sujeto demasiado blanco (o iluminado). Además produce ojos rojos. El problema de este flash es que incide frontalmente en el sujeto (no puedes hacer nada al respecto) y tampoco puedes alejarlo de él (en el caso que quisieras menor cantidad de luz). Si cuentas con un poco de dinero, invierte en un flash externo de calidad, asócialo con un difusor para flash (el cual sirve para dispersar y suavizar la luz y que no sea tan directa), y aprende cómo hacer uso de él correctamente para obtener la mejor calidad en fotografías.
27. Distrae a tus sujetos
Cuando haces fotografía de retrato, lo mejor es hablar con tus sujetos mientras lo haces. ¿Por qué? Sucede que cuando hablas con ellos, se sentirán más cómodos frente a la cámara. Ellos siempre están nerviosos y especulando sobre si el retrato los representará como ellos quieren. En la mayoría de los casos, la gente nunca se siente cómoda con su propio retrato. Por eso, si los distraes, ellos se olvidarán de posar. Pero no hace falta que seas un animador, bastará con sacar algún tema en común e intentar que se relajen y comiencen a hablar, si es necesario comienza con la cámara a un lado. Esto hará que las fotos sean más naturales y espontáneas.
28. ¿De que se tratan estos modos?
Si has comprado una nueva cámara, una de las primeras cosas que puedes hacer es probar sus diferentes modos. Deberías probar su modo automático, manual, prioridad a la velocidad y obturación, y programa. Al hacer esto, te familiarizarías con cada uno y conocerás sus ventajas y desventajas. No obstante, si tu objetivo es dominar la técnica fotográfica, siempre se recomienda NO acostumbrarse a los modos “automático” y “programa”. Por el contrario, procura aprender a utilizar los modos “manual”, “prioridad a la apertura” y “prioridad a la obturación”.
29. Ganando estabilidad
Si no tienes un trípode, no te preocupes, aun puedes sacar fotografías de calidad ganando un poco de estabilidad. Para lograrlo, apóyate mientras sacas las fotos, la idea es utilizar tu cuerpo como trípode. Puedes apoyarte contra una pared, o apoyar tus codos sobre un objeto estable. También puedes agacharte, o sentarte apoyando siempre la espalda e incluso acostarte boca abajo y apoyar la cámara en el piso.
Con todo, la mejor forma de emular un trípode es apoyar la cámara en un objeto estable y evitar tocarla con las manos.
Aparte de esto, para asegurarte de evitar fotos borrosas, lo mejor es contener el aliento cuando presionas el botón disparador.
30. Entiende la apertura
La apertura es un concepto fundamental en fotografía. La apertura es cuánto se abre el extremo del objetivo para dejar pasar la luz que llega al sensor de imagen (o película en cámaras analógicas) dentro de la cámara. Mientras mayor sea la apertura, mayor será la cantidad de luz que ingresa, y viceversa. El tamaño de la apertura se mide en F-stops con los números bajos señalando mayor apertura y los números altos menor apertura. Así, una apertura de f/2. 8 es mayor que una apertura de f/22. Por lo tanto con la primera apertura ingresa mayor cantidad de luz que con la segunda.
Los datos EXIF (Exchangeable Image File Format) son metadatos que se incorporan a las imágenes tomadas con cámaras digitales y otros dispositivos que capturan imágenes. Estos metadatos proporcionan información valiosa sobre la configuración de la cámara, la fecha y hora de la captura, la ubicación geográfica (si está habilitada), y otros detalles relacionados con la toma de la fotografía:
1. Configuración de la Cámara:
- Modelo de Cámara: Los datos EXIF incluyen información sobre el modelo de la cámara utilizada para tomar la foto. Esto puede ser útil para entender las capacidades y características de la cámara.
- Configuración de la Apertura y Velocidad de Obturación: Puedes aprender sobre la configuración específica de la apertura y la velocidad de obturación utilizada para la toma de la foto. Esto puede ser valioso para entender cómo se logró una determinada exposición.
- Sensibilidad ISO: Los datos EXIF también indican la sensibilidad ISO configurada al capturar la imagen. Esto puede proporcionar información sobre la sensibilidad a la luz y la posible presencia de ruido en la imagen.
2. Detalles de la Captura:
- Fecha y Hora: Los datos EXIF incluyen la fecha y hora exactas en que se tomó la fotografía. Esto puede ser útil para organizar y ordenar imágenes cronológicamente.
- Resolución de la Imagen: Aprende sobre la resolución de la imagen, incluyendo la cantidad de píxeles en altura y ancho. Esto puede ser útil para comprender la calidad de la imagen.
- Orientación: Algunos datos EXIF indican la orientación de la cámara al tomar la foto, lo que puede ser útil para identificar si la imagen se tomó en posición vertical u horizontal.
3. Información Geográfica:
- Coordenadas GPS: Si la cámara tiene capacidades GPS habilitadas, los datos EXIF pueden incluir las coordenadas geográficas exactas donde se tomó la foto. Esto puede ser especialmente útil para imágenes de paisajes o viajes.
4. Herramientas para Leer Datos EXIF:
- Visores de Imágenes: Utiliza visores de imágenes que muestren los datos EXIF directamente. Muchas aplicaciones y programas permiten ver esta información con solo abrir la imagen.
- Herramientas en Línea: Hay herramientas en línea que te permiten cargar una imagen y extraer los datos EXIF. Esto es útil si estás trabajando con imágenes almacenadas en la nube.
- Software de Edición de Imágenes: Algunos programas de edición de imágenes también muestran información EXIF y permiten editar o eliminar ciertos datos si es necesario.